7 de septiembre de 2023

Kricky Pelton Burguer Bar

Ayer fuimos de cita y por fin fuimos a una hamburguesería con tamaños de hamburguesa normales (y muy ricas): Kricky Pelton. C. lo nombró y reservé para las 21:00. Cuando entras por la puerta encuentras un local muy despejado y acogedor que parece una habitación japonesa, hasta que ves los fogones y piensas en el motivo de tu visita: una hamburguesa jugosa. Por fin menos es más, una carta lacónica con tres entrantes, dos tipos de hamburguesa*, unas patatas fritas, pancakes y ya. La primera vez que fui a un Five Guys, aparte de Obama, y todos los que se congratulaban de sus patatas fritas, noté les flipaba eso de 'diseñar tu propia hamburguesa'. ¿Qué pasa, estos no cocinan en casa?¿5G no tiene nada especial que ofrecer? Cuando voy a un sitio voy a fiarme. Basta ya de cartas eternas que te proponen cientos de platos, augurando un heródico, pídeme lo que quieras. Estoy harto de comparar ventiladores por internet, quiero un único sabor de helado para probar, quiero no pensar y a la vez acertar cuando salimos a cenar. En Kricky Pelton te ponen las cosas fáciles. No tardas en pedir, no tardan en servir.

Hay una obsesión con lo grande en lo que a comida para llevar se refiere. Hasta ahora casi todas las hamburgueserías de moda son agotadoras en cuanto a tamaño de hamburguesa, son mutantes que no te puedas terminar sin rozar lo obsceno. Además, estructuralmente valoro las hamburguesas que conservan la forma y no exigen cuchillo y tenedor para poder acabarlas sin desmoronamientos innecesarios. Intento mantener la máxima de 'satisfecho, no lleno' y en estos sitios suele ser imposible. {Por favor, ¡hagan móviles más pequeños!}. En Kricky Pelton, como se llama por lo visto la madre del dueño, las hamburguesas son de 50 gr y 100 gr, pan tierno, y extremadamente jugosas siguiendo por lo visto la tradición texana, estructuramente estables hasta su finalización.

Mención especial (los pancakes no son lo mío, así que me saltaré ese paso aunque a C. le encantaron) a los aros de cebolla extracrujientes rebozados con panko, las patatas fritas especiadas al corte en bastones cuadrados (Mc Classic Size) que puedes pedir en casa, aunque este miércoles estaba el local bastante tranquilo y atento. Vi que las cervezas las servían en copa, me restó un poco ver mi Coca-Cola en una botella de plástico, fue como bañarse con impermeable, pero en definitiva, una muy muy jugosa cena de cita a la que no le faltaba detalle.



* Resultó que el dueño, Jota Navasqüés, estaba en la mesa de al lado enviando mensajes mientras esperaba a unos amigos - olisqueando el ambiente, y pudimos enterarnos de la manera más indiscreta que estaban trabajando en una hamburguesa vegetariana/vegana (lo primero que eché en falta en su precioso diseño tipográfico de la carta). Escuchamos algo de eura pero también escuchamos perfección.

Kricky Pelton C/Modesto Lafuente 61 28003 Madrid