Cuando entró en casa, dejó el abrigo sobre el sofá y buscó el interruptor de la lámpara pero decidió no encenderla. Dobló las rodillas y se dejó caer sobre los cojines, estaba agotado. El apartamento no se había enfriado todavía, incluso sintió cómo el calor que antes lo había inundado escapaba lentamente como la luz después del atardecer. Pasó así, a oscuras, el tiempo suficiente para notar un cambio. Abrió los ojos y percibió que no estaba solo pero no podía ver a nadie. Se acercó a la ventana, en la calle apenas había ambiente salvo dos hombres que se despedían efusivamente. Cuando volvió la cabeza creyó ver a alguien en la oscuridad. Y supo con total certeza que se trataba del sí mismo un año antes cuando ocurrió. Se miró con ternura y sin rastro de rencor, sabiendo quizá que no podemos escapar de quienes somos, de que puede que mañana pase algo o es posible también que todo siga igual pero no podemos dejar de esperarlo con cierta moderación ¿o no?
'Right Now, Wrong Then' Hong Sang-soo, 2015
La idea de que la película se parta en dos versiones con ciertas variaciones sobre la misma historia es interesante. Además las variaciones no son exageradas, entran dentro de algo tan sutil como elegir ser honesto, o no serlo. Y pese a ser un cuento moral, tampoco hay una moraleja simplista. Me han gustado las ideas sobre la creación artística, algo así como "Si no pinto cada día siento que fallo a mi proyecto, es una forma de sacar cómo soy cada día, y dejarlo ahí, un poquito cada día y sin pretensiones", me recuerda al "Sin esperanza, pero sin desesperación" de Dinesen. Otra idea que aparece es la de que ir sin rumbo hace que puedas descubrir, si estás atento, muchas cosas durante el proceso. Y también "descubrir lo que se esconde debajo de nuestras vidas es la única manera de superar nuestros miedos" y mantenerse vivo descubriendo algo cada día. Esto que son ideas de autoayuda y no sé si tienen un tono cínico, tienen parte de verdad.
Con respecto a la película, como se deja entender en ella: hay comodidad en la convencionalidad y nos hace falta atrevimiento.
El título en castellano es "Ahora sí, antes no".
'As Bestas' Rodrigo Sorogoyen, 2022
Cine por años: la zona roja

También como propósitos, por países tengo que repasar:
- Irán
- Francia
- Italia
- Japón
- Corea del Sur
- China
- Suecia
- Dinamarca
- Bélgica
- Canadá
Historia de Shuggie Bain. Douglas Stuart.
M. me ha prestado y recomendado esta novela. La empecé a leer antes de la boda y para el viaje me dió miedo terminarla, así que la dejé en casa, y ahora la he retomado. Es la primera novela de Douglas Stuart y se debe de vender bien. Fácil de leer y descriptivamente muy precisa, la he disfrutado mucho. No llego a hacer clic, aunque te dejas llevar por la corriente. La Historia de Shuggie es dura y bien contada y hace que se te encoja un poco el corazón. Diría --y no me gustan estas comparaciones-- que viene a ser como un David Copperfield moderno --y algo más breve--.
Historia de Shuggie Bain, Douglas Stuart. Sexto Piso, 2021. 511 páginas. Traducción
de Francisco González López.
Te odio
te odio, dice,
guardando para sí una sonrisa
bueno, odio a todos
pero a ti más
porque estás más cerca
hoy te quiero y te odio
y mientras se llena
de rayos de luz
ese odio está bien.
retiro los platos de la mesa
y ella va a buscar
chocolate.
está bien.
Conectar con lo local
los restos
de la campana extractora
y la lámpara de estudio
¿por qué me es tan difícil
conectar con lo local?
con mucho esfuerzo,
la luz nublada del exterior
pinta de azul el apartamento
luchando con la pantalla
del ordenador
huele a caldo de pescado
y se oye una conversación vecina
'Naui Ajusshi' Kim Won-Suk, 2018.
Desde fuera, la estampa me ha recordado a la conexión de 'Drive My Car', esta ha sido mi primera incursión en el género k-drama y creo que no podría haber empezado mejor. Las sensaciones al principio, por la música o la fotografía son de estar viendo, por el aspecto, una telenovela de sobremesa. Una vez superados los prejuicios me he encontrado con una historia bien construida y buenos actores. Los personajes se desarrollan en profundidad y el argumento va avanzando con suficiente lentitud como para añadir una buena película de detalles especialmente sobre Dong-hoon y Ji-an. Los temas de la serie son muy humanos y tienen sensibilidad. He visto que la guionista, Park Hae-young, tiene otro reciente que se llama 'My Liberation Notes' que promete bastante, a ver si lo consigo ver más despacio, que es el ritmo que exige y así descansar.
naui ajusshi (aka my mister), 2018. kim won-suk. 1440 min.
La ficción siempre empieza cuando algo extraño o inesperado sucede
He leído una entrevista a Samanta Schweblin y me ha gustado mucho esta frase. Obvia, pero como esas obviedades que da gusto leer.
Pura Pasión. Annie Ernaux.
Después de leer 'La Mujer Helada', que --perdona por esto-- me dejó un poco frío, vuelvo a intentarlo ahora con algo más breve, apenas ochenta páginas, y de una premio nobel. Es una no-novela-experiencia sobre una pasión obsesiva y cómo transforma todo hasta destruir todo lo demás.
"Me ha parecido que la escritura debería tender a eso, a esta impresión que provoca la escena del acto sexual, a esta anguastia y este estupor, a una suspensión del juicio moral"
"Jamás había habido en mi vida nada más importante, ni tener hijos, ni aprobar oposiciones, ni viajar lejos que eso, estar en la cama con este hombre a media tarde."
"Perplejidad, el hombre al que se ama es un extraño"
"El hombre que regresó aquella noche tampoco es el que llevé dentro de mí durante el año que estuvo aquí, ni después."
Passion simple, 1992. Annie Ernaux. Traducción de Thomas Kauf.
Crónica del Pájaro que Da Cuerda al Mundo. Haruki Murakami.
El libro que he llevado a la luna de miel. Leyéndolo del sur al norte de Vietnam y luego un par de semanas de vida cotidiana. Me gusta el punto realista de alguien que simplemente pasa sus horas igual que podría hacer yo y que en sus naderías empiezan a pasas 'cosas'. Murakami se lee como si escribir fuera lo más sencillo del mundo, duda y escribe con simplicidad pero transmite muchas sensaciones, sensaciones que hacen extraño lo familiar.
- Broches de coincidencias, se abren y luego se cierran después de mucho tiempo.
- Lo que destruyó mi vida fue ese rayo de luz que nunca llegué a alcanzar a comprender. Desde entonces, nada me interesa, nada me llena.
- Sensaciones que parecen, por absurdas que sean, lo único auténico, como la sensación gelatinosa dentro de May Kasahara.
- Las películas de las nouvelle vague que huyen de las explicaciones como del diablo.
- Como todo lo que ocurre parece una lucha de fuerzas que pugnan por colocarte en un sitio por alguna razón después de toda una vida.
Crónica del pájaro que da cuerda al mundo. Haruki Murakami. 1994. Maxi Tusquets. 903 páginas. Traducción de Lourdes porta y Junichi Matsuura. 2001.
La figura más respetable
Lo que me gustaría leer hoy
Sustancias cancerígenas I
noticias de actualidad
influenser, estartap, clicbeit, laik
viva la vida
sé tú mismo, autoayuda
maindfulnes, denostados
cancelación, sostenibilidad
guait-guaxin, allail
tóxico, productividad, optimizar
progreso, incremento
ril, tic-toc
emprendedor
Ventanas
Algunas fotos hechas desde las ventanas de los grab en Vietnam. Creo que toda esta serie corresponde a los alrededores de Saigón.
Salón y Estudio
Hemos estado, antes de mudarnos al nuevo apartamento, prediseñando el salón y el pequeño estudio. Hay algunas herramientas online que facilitan mucho el proceso. Este se llama homestyler. Tiene un aspecto Counter Strike 2004, pero mola.
Sopa
Ya le vamos cogiendo el punto a la sopa de fideos y anoto algunas ideas. Pensaba que se llamaba 'Sopa Castellana' pero es más la sopa de ajo y pan la que se llama así. Bueno, en las noches frías y buscando este picorcillo cálido en la garganta apunto algunas de las claves para conseguirlo como me gusta:
- Entre las verduras: tallos de cebolletas, un par de zanahorias, media cebolla, apio, puerro y perejil fresco.
- Entre las carnes: trozos de huesos, un cuarto de pollo, ternera, espinazo salado, hueso de jamón y panceta o alguna parte más grasa.
- Dorar levemente con un chorro de aceite.
- No echar sal.
- Echar algunas bolas de pimienta.
- Hervir una hora en la olla a presión.
- Para servir: colar y hervir unos fideos y trocear las piezas favoritas sin huesos para la sopa.
Y así es cómo sale. Qué gusto. No sé si algún día lo haré para más de dos, pero no me sobra mucho caldo en la olla de 4.5 litros, apenas para picotear al día siguiente. La verdad es que es uno de mis platos favoritos.
Series (2022)
De entre lo que he ido encontrando en internet, anoto por aquí lo que me ha llamado la atención:
Vistas
- Irma Vep (****)
- The Rehearsal (***1/2)
- Severance (*****)
En el candelero:
- Better Call Saul
- Tokyo Vice
- The Bear
- Black Bird
- For All Humankind
- The Staircase
- The Offer
Viendo:
- Pachinko (**1/2). Un poco forma de telenovela. No sé cómo será la novela en realidad, pero poco a poco va teniendo forma de sobremesa.
- The House of Dragon (***1/2). Sin haber visto GoT, después de un café virtual con los de la empresa, le echamos un vistazo durante el viaje, está entretenida. Dracaris. (Dracaris = Nasgul).
Las tentaciones de hacer listas y listas es agobiante. Por lo menos el horizonte de sucesos parece despejado y es posible encender las máquinas de visionado.
Yo no me las dejo encendidas
En la cola miré el reloj. Solo me quedaban veinte minutos para llegar al último autobús. Me había costado encontrar las pasas. Cuando cambian la distribución del supermercado me siento como un bote de alubias en la sección de congelados. Pero bueno eso no vienen al caso. El envoltorio de las pasas de marca blanca había virado a lo que podríamos llamar un fucsia cosmético spears. Yo estaba sudado, con ropa de sport y en la cola, tres posiciones por detrás de la caja. Y cuando me di cuenta vi el mismo paquete de pasas metiéndose en una bolsa. Qué coincidencia. El caso es que el tipo al que estaban atendiendo, el del paquete de pasas fucsia spears, iba vestido también de deporte. Pues bien, paga la cuenta y se va. El tipo echó a andar y cuando andaba sacaba hacia afuera la punta de sus zapatillas igual que yo. Dato curioso también. Y cuando se adentró en las escaleras mecánicas se oyó: ‘¡Siguiente!’. En la cola de nuevo, a dos posiciones de la caja sentí un deseo irrefrenable de seguirlo. Era un impulso.
Dejé el carrito con las pasas dentro, pedí perdón y salí. En la calle habían encendido las farolas y ya apenas quedaba luz natural. Vi al tipo girar una calle a la izquierda y caminé despacio siguiéndolo y giré a la izquierda también, a unos veinte metros de distancia. Se detuvo en la parada del autobús y me acerqué y esperé. En el reflejo de la marquesina con publicidad Pepsi Max, máximo sabor, cero azúcar, fue cuando lo vi. Era similar a ese niño del campamento de Panticosa que se parecía a mí, pero ya adulto y crecido. No sé muy bien explicar por qué, pero casi como en la peli de ‘Tú a Londres y yo a California’, pero sin esa exactitud. El parecido era, ahora también amenazante: era como yo. Existía esa diferencia de cuando oyes tu propia voz en los audio-mensajes, una variación perceptiva. Era como enfrentarse a una realidad más real de lo que conocías hasta ahora. Cada segundo que pasaba, aquel tío, me parecía más clavadito a mí.
Vino el autobús casi lleno de gente, los dos nos subimos. Él encontró sitio de espaldas a mí al final del autobús cerca de la apertura de puertas. El autobús traqueteaba y anunciaba las paradas, esas cosas que hacen los autobuses. Mi doble miraba hacia abajo, probablemente su móvil y yo debía parecer un ciervo muy erguido estirando mi cuello y mirándolo sin parpadear entre las cabezas de los pasajeros. Así continuamos unas cuantas paradas hasta que llegamos a Beata, mi parada, las puertas se abrieron. Él seguía mirando su móvil, y en un momento, levantó la cabeza, y corriendo se levantó y salió mientras las puertas se cerraban, no pude seguirlo.
Me bajé en la siguiente parada y fui andando a casa, mirando atentamente a cada viandante. Ninguno se parecía a mí o a mi doble. Me costaba respirar y no sé si fruto de las agujetas del gimnasio me costaba moverme. Cuando llegué al portal me di cuenta de que me había dejado las llaves, pero las luces de mi casa estaban encendidas, y juro por lo más sagrado que, con la que está cayendo con las eléctricas, juro que yo no me las dejo encendidas.